Disparidad 5

Algo corto, antes de traerles un relato que ya he terminado y debo transcribir. Por ahora me retiro del mercado del romance, hace demasiado daño. 

♦♦♦

Hoy por vez primera fui consciente de tu ausencia. Una verdadera, porque ya llevábamos muchísimo tiempo sin vernos y otro tanto sin escribirnos. Pero esta noche con tu ausencia me refiero a la idea de que tú ya no te paseas por los jardines de mi mente tan a menudo como  solías hacerlo. Antaño permanecías perenne  en mi consciente. Tu sonrisa todavía me hacía reír en vez de sacarme lágrimas amargas.  Aún en ese entonces podía recuperar el tacto de tus manos rozándome con disimulo, yo presta a tus acciones, deleitándome con tu compañía. Ahora mi subconsciente trata  de rescatar la imagen de tus adorables ojos observándome con cariño, pero mi consciente o demasiado distraído u ocupado o indiferente. Mi consciente ya no quiere tener tiempo para  pensar en ti. Y cada vez son más esporádicas tus visitas, y tus rasgos se desdibujan perdiéndose en mi memoria, condenados a ser más una sensación que un hecho concebido. ¿Qué pasó? El encanto no sobrevivió lo suficiente como para mantener nuestra unidad. Y cuánto que ansié tu compañía y te lloré en silencio por tenerte lejos; tú pavoneándote en lo recóndito de mi cerebro. Ahora das pasos torpes y callados, tu presencia apenas es un insulso eco en la lejanía. Y lo que carcome mi consciente en este preciso instante es darme cuenta que tu débil existencia no me está doliendo, que me estoy entregando a la idea de no pensarte ni anhelarte; que estoy permitiendo que el tiempo te vuelva una visión borrosa de la que quizá, muy inevitable y pronto, desaparecerá por completo.

Etiquetado , , , ,

Deja un comentario